30 de julio, Día Mundial contra la trata de personas. Una realidad que debemos ver

Regresar a Noticias

30 de julio, Día Mundial contra la trata de personas. Una realidad que debemos ver

El tráfico de personas es una violación a los derechos humanos, considerada como la esclavitud moderna. El 18 de diciembre de 2013, la Asamblea General de Naciones Unidas designó el 30 de julio como el Día Mundial contra la Trata de Personas. Pero muchas veces instalamos ese término en la antigüedad, sin saber sus consecuencias hasta hoy. ¿Qué es la trata de personas? La trata de personas es la captación, traslado y mercado de adultos, niños, niñas o adolescentes mediante violencia o engaño, para ser sometidos a explotación sexual, trabajos forzados, servidumbre, esclavitud o extracción de órganos. Es una grave vulneración a los derechos de las personas y puede estar ocurriendo cerca nuestro. La trata de personas es una grave violación de los derechos humanos. Vulnera la dignidad, la libertad y los derechos humanos de una persona, a la vez que afecta seriamente su integridad física y psíquica. Se identifican dos fenómenos, el tráfico de personas para el trabajo y el tráfico de mujeres para prostitución. Las características propias del delito de trata de personas hacen que las personas tengan miedo o vergüenza de denunciar, incluso, que no se sientan como víctimas. Por ello, la sociedad civil es fundamental en la detección y denuncia de potenciales casos de trata (Trama, tejido migrante). Según cifras de UNODC (Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito) de 2018, la trata de personas es el tercer negocio ilícito más lucrativo a nivel mundial, luego del tráfico de drogas y tráfico de armas. Al 2018, la OIT estimaba que 40 millones de personas en el mundo son víctimas de trabajo forzoso, siendo muchas de ellas, víctimas de trata de personas. En Chile, este delito ha aumentado en un 1300% en los últimos tres años, de 27 víctimas a 376 hasta el año 2019, según cifras de la Policía de Investigaciones (PDI). Ante la contingencia del COVID 19, lamentablemente con las fronteras cerradas y la política de seguridad pública, suponemos que estas vulneraciones de derechos pueden aumentar. Considerando que las cifras se tornan complejo analizarlas sin poder estimar una cifra real de casos (incluso por la tipificación y criterios de investigación policial). PROPUESTA, COMPROMISO POR EL DERECHO A MIGRAR Y LUCHAR CONTRA LA TRATA DE PERSONAS Reconociendo la necesidad de crear mayor conciencia, solidaridad, espacios para prevenir, promover y proteger los derechos humanos, se transforma en un propósito y un deber ético como sociedad luchar contra cualquier vulneración de los derechos y dignidad de cualquier persona. Diversas agrupaciones, organizaciones y colectivos sociales, culturales, académicas/os, incluso disposiciones individuales de funcionarias/os públicos (entre otras) hoy se comprometen, apoyan, acompañan y asesoran a la población migrante en sus principales procesos migratorios a lo largo de Chile. Aun así, existen muchas personas que no cuentan con las redes suficientes, son engañadas, manipuladas y sometidas a violencia de todo tipo lo que les impide denunciar esta grave vulneración a los derechos humanos. Te invitamos a sumarte y ser parte de un movimiento capaz de integrar las diferentes culturas y saberes existentes en nuestra actual sociedad. La Fundación Madre Josefa, organización reconocida a nivel local y nacional por su trabajo en las ciudades de Iquique, La Serena, Talca, Temuco y Puente Alto, está desarrollando orientación, asesoría y acompañamiento en procesos migratorios, su principal enfoque es la “Migración Segura”, brindando asesoría respecto a estos trámites, además de intermediación laboral con diversos talleres y entrega de información de derechos de los trabajadores y trabajadoras. Por último, mencionar que se desenvuelve un área de desarrollo humano, donde se fortalece habilidades personales, entrega de ayudas paliativas a familias migrantes en tiempos de pandemia. El llamado es simple, es importante educar a la población/sociedad en su conjunto en temas migratorios, tanto a las que ingresan como las originarias del país receptor, en un ejercicio de apoyo y solidaridad con quienes más lo necesitan. No será necesario un ejercicio de caridad, sino en un hecho de dignidad, respeto a los derechos sociales y laborales de las personas y familias migrantes, los mismos que son exigidos cuando nuestros familiares deben migrar por cualquier motivo. Sumar aquí la angustia de estar en otro país, lo que acrecienta aún más las crisis, en tiempos donde se nos llama a la reflexión, debemos mirar y reconocernos en las personas, que más allá de ser mano de obra, es una persona con sueños, anhelos, familia, hijos/as, y madre, igual que yo, que tú. UNA PERSONA VALE MÁS QUE UN MUNDO #YoNoPagoPorSufrimiento #100porcientoContraLaTratadePersonas www.fundacionmadrejosefa.cl

Comparte esta nota

Regresar a Noticias